Teams, Google Meet y Zoom son nombres con los que nos hemos familiarizado en los últimos dos años. Con la emergencia sanitaria, la tecnología se puso al frente para garantizar la continuidad de todo tipo de actividades, en particular la educación.
Por medio de estos servicios es posible no sólo seguir una clase, grabarla e interactuar con docentes y compañeros, sino también emplear herramientas adicionales para el seguimiento continuo, como los cuestionarios y tests online.
El debate entre la vieja y la nueva escuela
Sin embargo, existen visiones encontradas que alcanzan tanto a los maestros y profesores como a los padres de los alumnos. Mientras una parte de ellos considera que la didáctica a distancia es tan buena como la presencial y que incluso aporta beneficios extra por la necesidad de una mayor autonomía en el proceso de aprendizaje, la otra la califica simplemente como una pérdida de tiempo.
Lo cierto es que la lecciones desde casa continuarán siendo una realidad en el corto plazo, especialmente en el ámbito universitario. Para muchos estudiantes, las plataformas de videollamadas y los campus virtuales son una forma útil de poder seguir su formación sin tener que dejar sus empleos o mudarse para poder concurrir diariamente a clase.